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martes, marzo 03, 2009
DOLCE & GABBANA ADORNADAS CON EL ROSTRO PINTADO DE MARILYN MONROE SUS PIEZAS
(ABC.es) No cabe la menor duda del gran poder de convocatoria que tienen los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana, a quienes con una sola palabra les basta para que las celebrities más deseadas del planeta acudan a cada acto que organizan. Y así lo demostraron ayer en la capital lombarda, donde la casa Dolce & Gabbana mostró sus creaciones para vestir a la mujer el próximo invierno, y cuyas glamourosas invitadas protagonizaron un desfile paralelo al que se vio sobre la pasarela. Las modelos Eva Herzigova, Claudia Schiffer y Nadja Auermann y las actrices Eva Mendes, Naomi Watts, Scarlett Johansson, Freida Pinto y hasta la española Elsa Pataky —muy floreada, por cierto—, arroparon a los modistas sicilianos en la presentación de una de sus colecciones más surrealista. Ya el pasado jueves los diseñadores presentaron en la pasarela milanesa sus propuestas más juveniles para la mujer con una puesta en escena muy operística —con el telón de fondo de «La Traviata» y la figura de Maria Callas—, llena de telas nobles plagadas de incrustaciones y cristales para hacerlas aún más barrocas. La colección de ayer, con algunas de sus prendas adornadas con el rostro pintado de Marilyn Monroe, era el barroco en estado puro. La mujer Dolce & Gabbana se protegerá del frio la próxima temporada con prendas muy recargadas, en blanco y negro, con toques de color en fucsia, dorado o burdeos, y dará mucha importancia a los detalles. Los clásicos guantes se convierten, por obra y gracia de los modistas, en originales tocados para la cabeza o a modo de bufanda protegen el cuello de la mujer. Zapatos imposibles con forma de concha o con incrustaciones de lentejuelas, casi siempre con tacón de cuña, y corales que hacen las veces de botones salpican toda la colección. Los hombros se realzan a base de un volumen que los diseñadores denominan «farfalla» («mariposa»), y que hacen que estos se inflen hasta extremos insospechados, dando imagen de una mujer con cierto aire regio. Las pieles toman al asalto la pasarela en prendas de abrigo o simplemente como aplicaciones en mangas y cuellos que, a modo de modernas gorgueras, producen cierta sensación de agobio. La firma Fendi, con unas propuestas con reminiscencias medievales; Max Mara, con el marrón y el negro como colores claves; y el británico John Richmond, con una dorada colección, conformaron esta sexta jornada de la Semana de la Moda de Milán que mañana cierra sus puertas.